En Colombia una noticia tapa la otra, somos un país que se mueve a un ritmo virulento, somos una sociedad en plena formación y transformación, nada nos complace, no hay un producto terminado, todos los días inventamos, y eso es lo que nos hace valiosos y dignos de reconocimientos y burlas, pero al final calificados como el país de las maravillas, si, “el país más feliz de la tierra”, no sé cómo, si hay hambre, muertos, atracos, desempleo, etc.
Intentare recordar ciertos episodios de esta semana para que nos relajemos, aquí no ha pasado nada, no hay más; en el caso de Neiva realmente el trámite del endeudamiento por los 40 mil millones fue un desgaste para la administración municipal, un rife rafe entre los concejales, una burla a la ciudadanía, fue darle la espalda al desarrollo social y urbano de la ciudad, fue desconocer el principio de las finanzas que se soportan en el crédito para apalancar proyectos, fue desconocer que estamos en la pos pandemia y que ese plan de desarrollo aprobado para este periodo fue y debió ser aprobado en plena pandemia cuando no sabíamos los estragos económicos que dejaría, sin embrago hoy cuando apenas los ciudadanos empiezan a levantar y pagar impuestos cumplidamente y que el gobierno nacional como los regionales debieron ocupar sus recursos en otras acciones de gobierno para atender el covid y que hoy no era razonable negar el crédito sobre la base de no conocer lo concejales en qué se invirtieron los primeros 60 mil millones o por qué no se terminaron todas las obras que debieron financiarse, desconociendo ellos, que primero entonces no hicieron seguimiento y control político y eso es igualmente grave (prevaricaron), y segundo, que lo que hicieron fue negarle las herramientas financieras para que el alcalde cumpla su plan de desarrollo el mismo que fue aprobado por ellos en 2020 donde el 3.58% corresponde al crédito por cien mil millones. así las cosas y de seguir la obstrucción absurda y de campaña próxima, el alcalde podría hacer uso de otras facultades y poner en venta algunos bienes y fondear al municipio o entregar en concesión las obras públicas por hacer.
En cuanto al gobierno nacional, triste realidad, un senador alcoholizado y de malas prácticas políticas, que fue capaz de contestarle a una de sus colegas de bancada que él no había sido elegido para dar ejemplo sino, para hacer leyes, que babosada, una vicepresidenta ausente como se sabía que iba a ser, una ministra de minas y energía que vive en el pais de los pitufos “pitufilandia” lo cual hace filosofando y tratando mal a su público como maestra de escuela “tronchatoro”; un congreso con una agenda legislativa atrasada, con un pacto histórico divididos y en escándalos, progresistas que se opusieron al proyecto de reducción del salario, siendo ese su discurso en campaña y fue su bandera pero parece que las van perdiendo día a día, en fin van más de seis proyectos de ley presentados por otros partidos políticos y no por el pacto histórico; promesas como la eliminación del 4×1000, eliminación del Esmad, educación pública gratuita entre otros que desde el gobierno ya dijeron que no se pueden hacer; un ministro presionando para salir a las calles si el congreso no aprueba como se quiere la reforma tributaria con frases cómicas “el que entendió entendió”, bueno son muchas perlas, lo importante es que un partido debe prepararse para gobernar, no solo para ganar elecciones o dejar constancias en los recintos de la democracia.
