Vestido de camisa blanca y jean oscuro, Víctor Manuel Méndez madrugó ayer a la reapertura de la frontera, no solo como un simple espectador, sino como el líder de la logística que hubo detrás para el paso de la carga.
Víctor fue el responsable de todos los detalles para que la reactivación formal del comercio en el paso fronterizo saliera a la perfección. Y así fue. Una mañana calurosa, como las que suelen hacer en Cúcuta, acompañó ayer el paso de 116,7 toneladas de carga entre Colombia y Venezuela.
“El trabajo de la reapertura no es de estos meses, se inició hace dos años con los líderes gremiales, regionales, mesas de trabajo, acuerdos y desacuerdos. Pero hoy se ve consolidado el sueño de los empresarios. Esto es fruto del trabajo conjunto del gremio, que impulsó el Gobierno nacional, que activó la frontera en la legalidad, porque nunca estuvo cerrada”, dijo Víctor, mientras iba bodega por bodega revisando el cargamento.
En los parqueaderos de la empresa Transportes Cóndor S.A.S. estaban ayer los cuatro camiones de carga que salieron al mediodía con mercancía hacia Venezuela.
Víctor es el director Regional Oriente de la Cámara Colombo Venezolana. Su jefe hasta el 7 de agosto fue el actual ministro de Comercio, Germán Umaña. Y estas semanas fue su aliado principal. Lo acompañó a todas las reuniones y se apersonó de coordinar el trabajo entre las empresas. Así lo evidencian las fotos de los encuentros.
Es profesional en Comercio Internacional, especialista en Economía Internacional y Gerencia Pública. También se desempeña como director regional de la Federación Colombiana de Transportadores de Carga por Carretera (Colfecar).
Paso fronterizo
“Lo que pasará en Cúcuta será un espejo de lo que sucede en Paraguachón, en La Guajira. Vamos a esperar que pase el día protocolario y seguir con la cotidianidad en la aduana, los horarios establecidos y los acuerdos de las autoridades. El objetivo principal es recuperar las cifras del comercio del Gran Santander”, comentó Víctor, mientras encabezaba la caravana de tractomulas, decoradas con globos amarillo, azul y rojo, desde las bodegas hasta el puente Simón Bolívar.
El visto bueno de ayer que dio Víctor fue así: 8 toneladas de papel higiénico, 8 de vasos plásticos, 20 de confitería, 8,6 de cajas de cartón, 1,4 de insumos médicos, 24,7 de polietileno, 22 de insumos de calzado y marroquinería, y otras 24 para el sector calzado.
Al suceso se unió Carlos Flores, quien fue el primer conductor que pasó por el Simón Bolívar. Estuvo ansioso durante el recorrido porque desde hace siete años no lo hacía y él fue el último conductor en hacer el recorrido de carga de Venezuela a Colombia, cuando las relaciones entre los dos países se rompieron.
“Pasar por Paraguachón no era rentable y me tocó empezar a trabajar en rutas de Colombia”, dijo este conductor, quien tiene familia en Venezuela y aprovechó para visitar a sus familiares.
Los vehículos que pasaron por el puente fronterizo fueron inspeccionados por la Dian. Tras el acto protocolario, se definió que el transporte de carga estará habilitado entre las 10:00 a.m. y las 6:00 p.m., según Invias. Sin embargo, habrá paso restringido para cargas mayores a las 30 toneladas.
“Venezuela se ha ido recuperando y está dolarizando su economía. Esta reapertura generará 120 mil empleos en transporte de carga, repuestos, hoteles, restaurantes y comercio”, señaló Víctor.
Ayer, cuando llegó el presidente Petro y mientras caminaba con sus ministros de Comercio, Transporte y Exterior, Víctor desapareció entre la multitud que se aglomeró en el Simón Bolívar. Su labor de coordinador de la logística había terminado, pero su satisfacción se desbordó con una sonrisa y muchos abrazos. Todo se dio como lo había planeado.
De esta manera, se restableció el transporte de carga por dos puentes fronterizos: el Simón Bolívar, que conecta con San Antonio del Táchira, y el Francisco de Paula Santander, que une con Ureña.
