En 2020, el actual presidente de la República, Iván Duque, aprobó un aumento de 5,2 % en el sueldo de los congresistas en Colombia, por lo que el nuevo salario que reciben es de $33.418.133 cada mes. Sin embargo, a este valor se le tienen que hacer varios descuentos.
A estos más de 33 millones que reciben los congresistas, senadores y representantes, se le descuentan los aportes de salud, pensión, fondo de solidaridad, fondo subsistencia y la retención en la fuente. Por lo que al salario inicial se le descontarían $8.292.556, lo que daría un salario final para los congresistas de $26.125.577, valor que puede variar dependiendo el caso de cada funcionario público.
Cada congresista tiene un grupo de trabajo que lo asesora en su gestión que se llama Unidad de Trabajo Legislativo. El costo de este grupo interdisciplinario (entre seis a diez personas) es de $43’890.150. Cabe destacar que el valor no puede ser de más de 50 salarios mínimos.
Por otro lado, los congresistas regresan, usualmente, cada semana a sus regiones de origen para socializar proyectos, compartir con sus bases políticas y descansar con sus familias. En épocas de sesiones, los congresistas tienen derecho a un pasaje semanal con un valor aproximado de $5’000.000 de pesos.
Por motivos de seguridad, los parlamentarios se movilizan en camionetas blindadas cuyo costo de alquiler es de $11.000.000 cada una. Hay algunos congresistas que por diversas razones o potestades tienen más de un vehículo.
Uno de los recursos que menos se conoce es el seguro de vida que todo congresista posee. Desde 2019, este rubro le ha costado al Estado alrededor de $1.245 millones de pesos.
Así las cosas, el costo total mensual por congresista es de $94’307.150 de pesos y si se multiplica este valor por aproximadamente 280 (número de legisladores), el valor mensual es de cerca de $27.820’000.000 de pesos.
