Llegada de las vacunas no significa el fin de la pandemia: OMS
Los principales referentes del organismo internacional explicaron que las infecciones continuarán y que “no todo el mundo tendrá acceso a los inoculantes a principios del año que viene”
Especial/24-7Semanario
Con información de AFP, EFE y Reuters
Las vacunas son una parte importante de la batalla contra el COVID-19, pero no acabarán por sí solas con la pandemia, dijo Mike Ryan, el principal experto en emergencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Estamos viendo surgir datos de que la protección puede no ser de por vida y, por lo tanto, puede haber reinfecciones”, advirtió el funcionario del organismo. “Las vacunas no equivalen a cero COVID”, sostuvo y agregó: “No todo el mundo tendrá acceso a las vacunas a principios del año que viene”.
En la misma línea se había expresado el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien advirtió que las repercusiones sociales y económicas del COVID-19 “son enormes y van en aumento”, por lo que sería ingenuo creer que una vacuna pueda revertir los daños causados por la pandemia, que durarán años o incluso décadas.
“A casi un año del inicio de la pandemia, enfrentamos una tragedia humana, así como una emergencia de salud pública, humanitaria y de desarrollo”, señaló Guterres.
No obstante, los funcionarios no dejaron de remarcar que las primeras aprobaciones de las vacunas constituyen noticias alentadoras. Esta semana, el Reino Unido se convirtió el miércoles en el primer país occidental en aprobar el uso de una vacuna contra la pandemia.
Lo que dice la OMS
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, explicó que el progreso vivido este año en el campo de las vacunas “nos da aliento a todos” “Podemos empezar a ver luz al final del túnel”.
Sin embargo, al igual que su colega, remarcó la necesidad de mantener las precauciones sanitarias a pesar de su llegada. “La OMS está preocupada ante la creciente percepción de que la pandemia se acabó”, advirtió. Y destacó que sucede en un momento donde países como Estados Unidos y varios miembros de la Unión Europea atraviesan un fuerte rebrote.
“La verdad es que en estos momentos, muchos países están sufriendo una alta transmisión del virus, lo que pone enorme presión en hospitales, cuidados intensivos y trabajadores sanitarios”, añadió.
Los casos globales de covid-19 ascendieron a 64,3 millones después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) fuera notificada de 385.000 nuevos contagios confirmados en las últimas 24 horas.
Los fallecidos en la pandemia han llegado a los 1,49 millones, 6.542 de ellos registrados en la última jornada, según las estadísticas de la Organización.
América roza los 27,5 millones de casos, Europa registra 19,3 millones y Asia Meridional, la tercera región más afectada, 10,9 millones.
La propagación del coronavirus se ha desacelerado en Europa en la última semana, dando cierto respiro y permitiendo a los gobiernos tomar medidas menos draconianas de lo que se temía con vistas a las fiestas de fin de año.
Según los datos transmitidos a la OMS, Estados Unidos tiene casi 13,8 millones de casos, seguido de India (casi 9,6 millones), Brasil (6,4 millones) y Rusia (2,4 millones).
Sin embargo, si se analiza la tendencia semanal, el segundo y tercer lugar se invierten, y Brasil pasa a ser el segundo país con más contagios acumulados en siete días (270.000), frente a 261.000 en India.
La vacuna de Moderna
La vacuna contra el COVID-19 de Moderna, que recientemente demostró tener una eficacia del 94%, hace que el sistema inmunológico humano produzca anticuerpos potentes que perduran durante al menos tres meses, mostró un estudio publicado este jueves.
Investigadores del estadounidense Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID), que co-desarrolló el fármaco, estudiaron la respuesta inmunitaria de 34 participantes adultos, jóvenes y mayores, desde la primera etapa del ensayo clínico.
En un artículo publicado en el New England Journal of Medicine, los científicos explicaron que los anticuerpos, que son los que impiden que el virus SARS-CoV-2 invada las células humanas, “disminuyeron ligeramente con el tiempo, como se esperaba, pero permanecieron elevados en todos los participantes 3 meses después de la dosis de refuerzo”.
La vacuna, llamada mRNA-1273, se administra en dos inyecciones con 28 días de diferencia cada dosis. Aunque la cantidad de anticuerpos cae con el tiempo, eso no es necesariamente un motivo de preocupación.
El director del NIAID y principal asesor de la Casa Blanca, Anthony Fauci, dijo que es muy probable que el sistema inmunológico recuerde el virus si se vuelve a exponer más adelante y luego produzca nuevos anticuerpos.
De manera alentadora, el estudio mostró que la vacuna activó un cierto tipo de célula inmunitaria que debería ayudar en la llamada respuesta de memoria, pero solo un estudio a más largo plazo confirmará si este será realmente el caso.
La vacuna Moderna será revisada el 17 de diciembre por un comité asesor de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por las siglas en inglés), y podría recibir luz verde para su aprobación de emergencia poco después.
Al igual que la vacuna producida por Pfizer y BioNTech, la de Moderna se basa en una nueva tecnología que utiliza material genético en forma de ARNm (ácido ribonucleico mensajero).