Juventud y emprendimiento, el sello del huilense clasificado a los Juegos Olímpicos
En su primer combate de la vida su madre no le permitió participar, hoy luego de ocho años de entrega y dedicación, está ad-portas de su primera participación en unos Juegos Olímpicos. El luchador huilense Julián Steven Horta es un joven emprendedor, deportista, barbero y padre que añora una medalla olímpica.
Por: Isauro Quintero Barrera
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Especial/ 24-7 Semanario
Boxear o hacer parte de las artes marciales fue su objetivo desde niño, el no encontrar una escuela para ello provocó que la brújula cambiara un poco, luego que un día su hermana llegó a casa y le contó a cerca de la lucha olímpica un deporte en el que hombres y mujeres derrotan a su oponente usando llaves y técnicas de protección, en el caso de la rama masculina pueden participar en dos modalidades libre y greco, la diferencia es que en la última no se pueden utilizar las piernas ni atacar las del rival, solo se utiliza la parte superior del cuerpo, mientras en la categoría libre las piernas son para el ataque y defensa, sin restricciones.
El neivano Julián Steven Horta se quedó con la grecorromana, actualmente -67 kilogramos categoría que hoy lo tiene clasificado a los aplazados Juegos Olímpicos de Tokio de 2020 y es el tercer huilense en estar en las justas más importantes del mundo.
“Cuando tenía nueve años una prima llevó a mi hermana a entrenar lucha y al llegar empezó a contarme maravillas, decidí ir a pie desde el barrio Las Américas hasta El Estadio, ese día nos perdimos, pero llegamos, conocí y me gustó mucho, fue una experiencia muy bonita, al inicio era un juego, pero seguí entrenando, iba para un torneo a los cuatro meses y mi mamá no me dejó competir, eso me desmotivó, no volví a entrenar, pero luego todo cambió” recordó Julián Steven Horta.
Alterna la barbería con la lucha olímpica
Además del deporte otra de las pasiones de Julián es la barbería, por cierto alterna estas dos tareas, incluso a algunos de sus compañeros de equipo les hace los cortes y arreglos, habilidad que aprendió viendo videos y un curso, “es una combinación amena, ya que en las mañanas entreno temprano tipo 6:00 a.m. y ya a las 9:00 a.m. me desocupo, llego a casa, desayuno, ahí abro la barbería y estoy hasta las 6:00 pm y me voy a mi segundo entrenamiento” explicó.
Pero no solo están estas dos labores, Horta también ahora es papá de Juliana, que se ha convertido en uno de sus tesoros, por cierto aclaró que el nombre no es por el suyo, simplemente le llama mucho la atención, aunque su esposa quería otro pero ella estuvo de acuerdo, “la labor de papá ha sido una experiencia bonita, pero a la vez algo complicado porque al principio lo veía como algo difícil que me iba a quedar duro, por ahora las cosas van bien, contento con mi hija” (sonrió).
La hazaña fue en Canadá
“Hijo ya no eres el mismo de hace dos años” estas palabras le retumbaron en la cabeza al huilense Julián Steven Horta el día del combate más importante de su vida ante el brasileño Brito en la semifinal del preolímpico y Juegos Panamericanos en Ottawa, Canadá, ese día lo recuerda como si fuera ayer, “todo, todo, desde que me levanté, hasta que me fui a dormir”, ese día 13 de marzo estaba mentalizado que podía ganar, que lo lograría y las palabras del entrenador David Gutiérrez de la Selección Colombia lo impulsaron más, ya que precisamente dos años atrás había perdido con el mismo oponente, ahora las cosas eran distinto.
“Eso me quedó retumbando en la cabeza y yo decía si es cierto, no soy el mismo, yo he mejorado y puedo ganarle, entré al combate, empecé a trabajar de la forma en que se había planeado, cuando le enviaron pasivo a mi contrincante yo le marqué los dos puntos en el piso, eso me dio más seguridad, ahí entré más seguro, me dio la oportunidad y metí un látigo y fueron cuatro puntos y quedé 7-0 ahí se me subieron más las pulsaciones, emociones y me mentalicé que iba hacerlo y con ayuda de Dios y mi esfuerzo se dio y gracias a quienes me apoyaron” así clasificó el joven ‘opita’.
Horta obtuvo el cupo número 28 para Colombia para los Olímpicos de Tokio que ahora están fechados para el 2021 en la división de los -67 kilogramos en modalidad grecorromana, en el camino a la clasificación, se impuso en los cuartos de final ante el ecuatoriano Alberto Rivas 6-3, para avanzar a la semifinal y derrotar al brasileño Joilson de Brito por superioridad técnica, con marcador de 9-0.
“Ese momento representa satisfacción, alegría, nostalgia, plenitud ya que he entrenado por muchos años, he sacrificado mucho y mi familia ha sido fiel testigo de esto, ha sido algo muy esperado, fue un momento de mucha alegría para todos, todos mis allegados, mis compañeros, mi entrenador, mi esposa, ha sido lo más bonito que me ha pasado como deportista. Me estoy preparando para esto, no me quiero conformar solamente con una clasificación, sino también ser medallista olímpico porque sé que estoy para cosas grandes” comentó Julián.
Sin competencias este año, ¿cómo ve el panorama y cómo ha sido el apoyo gubernamental en medio de la pandemia?
Si, la situación ha estado complicada por la pandemia, pero igual nosotros no paramos, seguimos entrenando y preparándonos fuerte para lo que se viene que son Juegos Olímpicos. El respaldo gubernamental ha sido bueno y cumplido, por parte del Ministerio desde que clasifiqué, al mes, empecé con el apoyo, han estado pendientes en la parte médica, en lo deportivo, de mis entrenamientos, como estoy físicamente, psicológicamente, entre otros aspectos.
¿Cuáles han sido los principales retos en la vida deportiva?
Esto es de muchas caídas, obstáculos, tropiezos, pero igual no siempre se vive en el piso, también se sube, se triunfa, aunque son más las caídas que los triunfos, pero eso lo ayuda a crecer y a madurar como deportista; en el 2015 en unos Juegos Supérate Intercolegiados que era clasificatorio a un Centroamericano desafortunadamente no se me dieron las cosas y perdí, seguí trabajando, otra caída dura fue para Brasil en el 2019, fue mi último torneo panamericano Juvenil, iba con muchas expectativas de ser campeón porque había entrado a selección Colombia de mayores, había mejorado mucho, pero no se dieron las cosas, perdí, eso me desmotivó, pero nosotros los deportistas estamos buscando salir adelante, a no echar pie atrás para cumplir los sueños.
¿Cómo se ha sentido en medio de la pandemia?
La pandemia ha sido muy complicado para todo el mundo, ya que no podemos entrenar de la misma manera, se cancelaron eventos, torneos, es algo que también bajonea mucho, lo desmotiva, el encierro lo estresa, ha sido un poco complicado, no podemos decir que no ha sido duro, porque si todos teníamos expectativas este años de viajar, competir, igual los Juegos Olímpicos eran este año, pero todo también se puede tomar desde el lado bueno, porque habrá más tiempo de preparación.
¿Qué recuerda del día del combate que le dio la clasificación a los Olímpicos?
Es algo que ha quedado marcado en mí, es un bonito recuerdo, una grata experiencia, algo que no se puede olvidar nunca, recuerdo mucho cuando marqué los dos últimos puntos, íbamos 7-0 y me faltaban un punto para ganar ya que la superioridad era de 8-0, el brasileño hace un amague de lanzar o tira a lanzar y se arrepiente, y yo aprovecho para entrar por ese lado y le marco los dos puntos, yo miraba al juez, el marcador, si me los habían dado o no, no podía creer cuando el árbitro me dice levántese que ya, no podía creer, yo lo que hice fue arrodillarme y darle las gracias a Dios porque fue un triunfo muy bonito.
¿Cuál es su objetivo o próxima meta?
Seguirnos preparando, entrenando fuertemente, esperar a que se baje un poco la pandemia para que nos concentren de pronto en Bogotá, que nos hagan valoración, test, para mejorar la preparación para obtener un buen resultado para el 2021. Mi próxima meta son los Juegos olímpicos, estoy motivado, inspirado en seguir entrenando y preparando bien, para obtener un buen resultado ya que haría historia en Colombia y en mi departamento, ya que una medalla olímpica no sabría como describir la alegría, la satisfacción que daría de tenerla, no solo para mí sino para para todos los que me rodean”.