En la ciudad de Medellín fueron capturados en las últimas horas cinco personas que supuestamente habrían participado en el frustrado atentado terrorista registrado en el aeropuerto Camilo Daza de Cúcuta y que le costó la vida a dos agentes antiexplosivos de la Policía Nacional.
Los sujetos cayeron en poder de las autoridades en desarrollo de la «Operación Dignidad», que se desplegó tras la detonación de un artefacto explosivo oculto en una maleta que un terrorista dejó abandonada al ser detectado por la Policía y emprender la huida, hechos ocurridos el pasado 14 de diciembre en inmediaciones de la terminal aérea de la capital de Norte de Santander.
Tres hombres y dos mujeres, cuyas identidades no fueron reveladas, fueron capturados por unidades de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (DIJIN) de la Policía Nacional en desarrollo de cinco allanamientos realizados simultáneamente en el corregimiento Santa Helena y los barrios Jesús, Robledo Miramar y Brasilia, de la capital de Antioquia.
Inmediatamente los capturados fueron trasladados a la ciudad de Cúcuta para ser judicializados por un juez de control de garantías.
Los sujetos serán procesados presuntamente por los delitos de terrorismo, homicidio agravado, tentativa de homicidio y fabricación o porte ilegal de armas, municiones y explosivos.
Como se recuerda, el 14 de diciembre pasado dos sujetos intentaron instalar sendas cargas explosivas en dos helicópteros de la Policía y el Ejército parqueados en la base militar que opera en el interior del aeropuerto Camilo Daza de Cúcuta.
Al ser descubiertos, emprendieron la huida. Luego, se ubicó una maleta abandonada en inmediaciones de la pista principal por lo cual fue llamado el escuadrón antiexplosivos de la Policía Nacional.
Los intendentes William Bareño Ardila y David Reyes Jiménez, integrantes de la unidad, procedieron a verificar el contenido de la maleta y efectivamente encontraron en su interior una carga explosiva, la cual estalló cuando procedían a desactivarla, causándoles la muerte de manera instantánea.
La acción terrorista fue atribuida al frente 33 de las disidencias de las Farc, comandado por alias “Jhon Mechas”.
Tras las primeras investigaciones, la Policía Nacional divulgó los retratos hablados de los supuestos autores del ataque, ofreciendo una recompensa de hasta 100 millones de pesos por información que condujera a su captura.
