Las más reciente encuesta Pulso Social del Dane reveló que Barranquilla y Cartagena son las peores ciudades en seguridad alimentaria; es decir, un buen porcentaje de ciudadanos no tuvieron sus tres comidas diarias.
En Cartagena, entre abril y junio del 2021, solo el 27,8% de los habitantes dijo tener garantizados el desayuno, almuerzo y cena diaria, mientras que el 67,5 % tuvo las tres comidas pero antes de la pandemia.
En Barranquilla, solo el 29% de los hogares dijo haber consumido las tres comidas diarias, entre abril y junio. Antes de la pandemia, el 82 % de las familias podía desayunar, almorzar y cenar.
Precisamente, la situación en el Caribe se agudizó por cuenta de la emergencia sanitaria. En el caso de la capital del Atlántico cuestionan que la ciudad avanza en materia de infraestructura, pero en temas sociales aún no es suficiente.
Tanto Barranquilla como Cartagena viven de una alta informalidad por lo que la situación de cientos de trabajadores informales se ha visto afectada por la pandemia. Familias sin ingresos y sin poder conseguir lo del sustento diario. A estas dos ciudades se suman Montería y Sincelejo.
