Según informó Marca, la farmacéutica estadounidense Moderna anunció a través de un comunicado oficial que inició las pruebas de las últimas fases para demostrar la efectividad de su vacuna contra el COVID-19 para menores de 12 años.
El estudio, que es conocido como KidCOVE y será válido para niños entre los 6 meses a 12 años, se llevará a cabo en colaboración con el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAD), los Institutos Nacionales de Salud (NIH) y la Autoridad de Investigación y Desarrollo Biomédico Avanzado (BARDA).
Además, las pruebas se realizarán en dos fases a más de 6.700 niños de Estados Unidos y Canadá. La primera será para determinar la mejor dosis y durante la segunda se administrará el suero en dos dosis a una muestra aleatoria.
“Este estudio pediátrico nos ayudará a evaluar la seguridad e inmunogenicidad de nuestra candidata a vacuna contra el COVID-19 para esta población más joven”, afirmó Stéphane Bancel, director ejecutivo de Moderna.
Las autoridades estadounidenses informaron que si los resultados de estas pruebas son positivas, los niños de secundaria podrán ser vacunados durante el otoño de este año y los más pequeños a comienzos del próximo año (2022).
